
Entre tiendas de campaña y alguna silla de playa arranca la primera jornada de encierro de los trabajadores de Alestis. La actitud de los representantes de la compañía durante la última reunión ha minado el ánimo de la plantilla afectada por el ERE, que se agarra como puede al compromiso de empleo que les hizo la empresa. Desde que se suspendieron los cursos de formación el pasado 1 de abril, todos cumplen íntegramente su jornada laboral ante la planta de El Puerto, era allí donde pensaban que estaría su puesto de trabajo una vez concluidas las clases.